Como algunos de vosotros os habéis quedado con las ganas de saber la respuesta de Sean a la carta que le escribió Tina, aquí tenéis su contestación.
En Londres, a 17 de septiembre de 1811
Mi amada Tina:
Leo y releo la carta que me escribiste. Mi corazón parece dar brincos de alegría. ¡Mis sentimientos son correspondidos!
Tengo la sensación de que he pasado toda mi vida buscándote.
Y, al final, te he encontrado. Cuando mi hermana Ellie nos presentó, sentí cómo mi corazón me daba un vuelco. ¿Lo notaste, Tina? Algo dentro de mí me decía que mi espera había terminado. Que no debía de seguir buscando, pues te había encontrado.
Cada vez que iba a verte, lo hacía deseando ganarme tu corazón. Lucho cada día que pasa por ser digno de ti. Por sentir que tú también me amas. El amor, cuando es correspondido, es más hermoso. Tina...Sólo puedo pensar en ti.
En pasar cada segundo de mi vida a tu lado. Soy feliz cuando bailo contigo en Almacks. Sólo tengo ojos para ti. Mis labios, hasta que no apareciste, no habían besado a nadie más. Sólo te he besado a ti. Te reirás al leer estas líneas. Pero es verdad.
Te escribo estas líneas mientras te contemplo dormir. Has venido a mi casa con la intención de entregarme tu carta. Tuve la sensación de que nuestras almas se fusionaban. Nos hemos convertido en un solo ser, Tina.
¿Me crees? ¿Piensas que soy sincero? Sí...
Te miro mientras duermes y me siento el hombre más feliz del mundo. Tu respiración es acompasada. Cuando caminamos por Hyde Park, nos cogemos de la mano. Miro tus dedos que encajan a la perfección entre mis dedos. Cuando nos sentamos sobre la hierba, seguimos cogidos de la mano. Cuando nos separamos, siento el vacío que dejan tus dedos entre mis dedos. Y duele ese vacío. ¿Te pasa a ti lo mismo que a mí, Tina?
Estás muy guapa cuando duermes. La noche va desapareciendo. Te mueves en la cama y siento tu respiración. Te arropo con las mantas de mi cama. Ya no estamos solos. Nos hemos encontrado y no volveremos a separarnos nunca más. Veo tu cara de ángel que rebosa serenidad.
Cuando cierro los ojos, veo tu imagen, Tina. Escucho el sonido de tu voz. Tu sonrisa me ha llegado al corazón. Te abrazo con fuerza. Quiero hacerte reír. Y quiero que te apoyes en mí cuando estés triste. Que puedas confiar en mí. En lo mucho que te amo.
Te beso en una mejilla. Te abrazo y te beso en la boca.
Esta noche, he probado el sabor de cada centímetro de tu piel con mis labios.
Tus dedos acariciaron mi cuerpo. Yo llené de besos cada centímetro de tu piel. Te chupaba. Te mordía. Te lamía. Te llené de besos. Te abracé con fuerza queriendo fundirme contigo. Te besé de manera larga y cálida en la boca. Y nos poseímos mutuamente. Eres mía. Yo soy tuyo.
Vuelvo a besarte. Torno a abrazarte. Te beso en una mejilla. Lo único que pienso en estos momentos es en una cosa. Mañana, iré a ver a tu padre. Le contaré que quiero casarme contigo. Ellie se pondrá contenta cuando se entere. Entonces, estaremos siempre juntos. Te beso en la frente. Descansa, mi amor, porque vamos a estar siempre juntos.
Nuestras vidas empezaron el mismo día en que nos conocimos. Estábamos destinados a encontrarnos. Y así ha sido, mi amada Tina.
Te amaré hasta el último día de mi vida.
Sean.
Oh Dios! Que linda carta. Está llena de ternura, amor y sensualidad. Lo más importante, que Sean a correspondido a Tina. Genial!
ResponderEliminarUn beso
Hola Yessy.
EliminarNo pensaba continuar con esta historia, pero me habéis animado mucho a que siga.
No podía concebir otro final. Sean estaba enamorado de Tina.
Un fuerte abrazo, amiga.
Uy que hermosa pareja son . Me encanta esta historia espero que Sean y Tina se vean de nuevo. Un beso y buena semana
ResponderEliminarHola Citu.
EliminarPor desgracia, la historia termina aquí.
Me alegro muchísimo de que te haya gustado.
Un fuerte abrazo, amiga.
¡Y feliz semana!